Italia y su cocina, muchos sabemos que dos de las cosas más destacables de la gastronomía italiana son la pizza y la pasta, pero decir pasta, es generalizar mucho cuando existen cientos de tipos de pasta, ya sea variando los sabores y colores, las formas y texturas, o incluso los tipos de harina. Italia tiene otros muchos platos famosos, incluso postres como la panna cotta, un postre muy típico de la zona del Piamonte. Volviendo al tema de la pasta, hoy haremos unos tagliatelles de espinacas con pistachos, nueces y Grana padano, queso que acompaña muy bien ya que pega con las nueces, ¡y no hay quien se resista a ese atractivo color verde que le dan las espinacas! Como curiosidad, el origen de los tagliatelles es Bolonia y su combinación de salsa más clásica es la salsa Bolognese de carne.
¡Comencemos!
Ingredientes para 4 personas:
Para la pasta:
- 300 gramos de harina floja
- 4 yemas
- 1 clara
- 1 puñado de espinacas frescas (si quieres más color, añade más)
- Agua
- Sal
Para acompañar:
- 10 nueces peconas
- 20 pistachos
- Queso Grana Padano en polvo
También necesitarás:
- Una cortadora de pasta
- 1 cazuela
- 1 cuchillo
- 1 escurridor
- 1 mortero de piedra
- Una cuchara para pasta
1- Lo primero que hay que hacer, es cortar las espinacas en trozos pequeños.
2- Mete los trozos de espinacas en el mortero de piedra y añade un chorrito de aceite. Con el mazo del mortero, machaca las espinacas hasta conseguir una "pasta" uniforme y sin trozos grandes.
- Añade la clara al mortero y remueve hasta que se integre con las espinacas
3- Para hacer la base de la pasta, pon 250 gr de la harina en una ensaladera haciendo una forma de volcán, y en el centro, pon las 4 yemas y la mezcla de clara y espinacas.
- Con la ayuda de un tenedor, remueve de dentro hacia afuera incorporando poco a poco la harina del volcán.
- Si has integrado ya toda la harina y sigue liquida, añade los otros 50 gr de harina.
- Si ya tiene una consistencia manejable resérvala.
4- Una vez que ya tengas la consistencia adecuada para la pasta, amasala un poco en una superficie que no sea de mármol.
- Dale forma de bola.
- Echa unas gotas de aceite y extiéndelo por la bola.
- Cúbrelo con papel film y déjalo en la nevera al menos 1 hora para que se relaje la masa, si lo dejas 6 horas, seria mejor incluso.
5- Pasada la hora, sácalo de la nevera y córtalo en dos porciones para que sea mas fácil a la hora de alisarlo.
- Pon agua a hervir con sal en una cazuela
- Alísalas con la ayuda de la cortadora, hasta dejar la masa lo más fina posible.
- Una vez lisa, dale un poco de harina por ambos lados para que nos se pegue al cortarlo, y pásalo por la ranura de hacer tagliatelles.
6- Cuando el agua esté hirviendo, añade una cuarta parte del total de los tagliatelles y deja que se hagan 30 segundos si los quieres al dente, sino 45".
- Antes de sacarlos, comprueba que estén bien probando alguno.
- Repite lo mismo con toda la masa.
7- Para enfriarlos, mételos en una escurridera grande y échales agua fría del grifo para cortar la cocción. En el caso de que la pasta fuese a ir acompañada de una salsa, no habria que enfriarlas bajo el agua sino con las manos, y sin echar agua.
- Añadeles aceite y sal y revuelve para que al reposar, no se peguen.
El porqué de que no se puedan mojar con agua fría es porque absorben agua y se quedan pastosos antes. Y porque al mojarlos, se le va la capa de almidón que les recubre y que hace que se peguen las salsas. De modo que si la pasta no va a ir con salsa, y por tener exceso de harina o cocción han quedado pegajosos, puedes lavarlos.
8- Trocea un poco los pistachos y las nueces.
9- Finalmente, para emplatar, sirve una ración de pasta en cada bol, y añade unos pocos pistachos y nueces picados por encima, también espolvorea un poco de queso Grana Padano.